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Cuando estoy en deuda y no lo sé...

Si hay algo en mi vida que me ha preocupado es el estar en deuda y no saberlo. Recuerdo hace bastantes años en un pequeño comercio en el que tenía cuenta por parte de una asociación y por la mía propia. Hacía consumos por las dos vías dependiendo del beneficiario y sin problema... o eso creía yo. Resulta que en cierta ocasión hablando con el comerciante salió el tema (puede que él lo provocara) de los que le pagaban mal o no pagaban. Y yo le pregunté: yo no te debo nada, ¿verdad? Y resultó que sí. Mi deuda era antigua. Además había comprado y abonado otras posteriormente tanto por mi parte como a nombre de la asociación. Al preguntarle me indicó que había perdido buenos clientes por reclamar "olvidos" y que en mi caso había preferido dejarlo pasar porque era pequeña. Yo le dije que me parecia mal y que al menos cuando alguien me beneficiare quería ser consciente para considerar la gratitud asociada... le pagué y pedí que no dudara en reclamar en el futuro cualquier cuestión pendiente. No puedo decir que desde aquello he sido especialmete cuidadoso en evitar que esta situación se vuelva a repetir.

Hete aquí que hoy en pleno S.XXI me ha ocurrido algo parecido. Resulta que atraído por las condiciones de una oferta de un operador decido acometer las portabilidades, cambios de titulares y variados procedimientos que se enrevesan y se extienden por mor de mas de tres meses. Mi objetivo era el ahorro económico algo que expresé en variadas ocasiones a mis múltiples interlocutores en el trayecto procedimental. Pedí en varias ocasiones a varios de estos que me confirmaran que no recibiría ningún costo adicional ni reclamación de cobro ya que mi motivación era la de control de los gasto (que fuera fijo y controlable). Esta conversación dará para otra reflexión...

Resulta que en la cuenta del banco observo unos cargos que no me cuadran. Llamo a mi operador. Resulta que no sé que juego del móvil ya que no me lo saben decir (en realidad yo sí que lo sé) que traía el nuevo terminal como versión demo ha generado cargos. Y vamos que si yo quiero aplicaciones o servicios supongo que lo normal es que los solicite me los oferten lo acepte y pague, y hasta disfrute. Y resulta que puede ser que lo haya hecho y lo que haya ocurrido es que lo haya hecho alguno de los niños en mi nombre.

Y no es este el asunto del que me quejo. Bueno en segunda instancia sí. Ya que no sé si un menor puede comprar en mi nombre y que eso sea válido y legal sin haber otorgado las correspondientes autorizaciones. Ultimamente hemos oido noticias de que uno de los grandes está devolviendo dinero...

De lo que me quejo es de que un operador se haya erigido en pagador de mis correrías por internet y que haya fiado dinero para que yo tenga servicios y resulta que yo no le he contratado todas estas prestaciones y he sido un ingrato quejandome y reclamando que esas cosas no se hacen. Hoy probaré en algún establecimiento a derivar el pago a estos señores a ver si lo aceptan.

Después de hablar hasta cuatro veces con el operador y de conectarme a dos páginas web distintas (al principio eran tres pero el sistema ha decidido que dos de ellas las podía juntar, ¡qué detalle! un ratico de espera y al lío) me indican que está registrado que hemos contratado las prestaciones y que tendré que atender los importes. Por el camino me dicen que si internet es complicado (le he dado la razón como no podria ser de otra manera aunque le he contado el periplo de compañías y terminales de los que he disfrutado sin incidencias), que la letra pequeña no siempre la leemos (claro y mas aún si las pantallas son pequeñas, que los móviles de regalo son pequeñicos) y que si en un juego pone Demo puede haber cargos por funcionalidades (y yo he dicho que con perretas chufletes que si quiero algo, que faltaría más que se paga y aquí paz y allí gloria). Mi reclamación la he fundamentado en que no he sido consciente ni he recibido información de que al activar el servicio ellos pagarian por mis compras y que luego ellos me lo cobrarían a mí. Y más aun con lo peregrino de la interlocución cuando en varias ocasiones me decían que solo podían atender reclamaciones de los servicios que ellos prestan no de los de terceros. Pero resulta que se prestan a facilitarme el que los pueda pagar pero luego que me aclare yo con ellos. Qué complicada hacemos la vida. Qué tiempos en los que cuando uno quería una app se daba la mano con el desarrollador y el escribano le hacía el código en un pergamino... e inmediatamente se pagaba.

De forma bastante amable he pedido que se considere la devolución de los importes relacionados con las prestaciones al haberse erigido en intermediarios de un servicio de pago que yo no había contratado y que no había sido informado de su activación.

Ya saben que estas cosas hay que tomarselas con filosofía y buen humor y que la gente que le atiende a uno al final está trabajando. Por esto, por el camino, hasta les he contado la anecdota de lo que podía ocurrir cuando vas por la calle o estas en un centro comercial y alguien a tí o a uno de los tuyos te "obsequia", ... y resulta que luego hay que pagarlo. Y ya está el lío montado... que si "esto me gusta ...", "que se lo devuelvas ..." y del donante emerge una voz solicitando un pago. En fin ¿picaresca? 

También me he acordado de otra anécdota mas cogida por los pelos en que en los principios de la web oí a un conocido decir: "... si esto de descargar canciones no es legal, yo no quiero líos". "Que me digan a dónde puedo ir o como puedo devolver la que descargué ayer que no quiero problemas..."

En fin confiemos en la cordura y sobre todo en que estas prácticas no se repitan.

¿Cómo lo hacemos?

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