No, no se equivoquen esto no es un post religioso. Además espero que la pequeña licencia del título aunque un poco frívola, no moleste a nadie.
Lo que les quería contar es mi experiencia (que no religiosa...) con Hacienda. Hace bastantes años que utilizo los servicios de ayuda de la Agencia Tributaria llegando estas fechas. Normalmente descargando el programa PADRE (vaya, PADRE, Jesús... no se sigo en una línea un tanto iluminada) instalándolo e introduciendo los datos para obtener el impreso con la declaración. Ya sé que la Agencia hace la declaración y que las entidades colaboradoras también, pero el hacerla siempre me ha interesado, aunque la verdad es una forma un poco tonta de perder un fin de semana (no por el tiempo que cuesta hacerla sino por el que pierdo entre que busco los datos fiscales, descargo, instalo, me pongo y no..., que estas todo el fin de semana con la historia).
En fin este año al haber instalado Ubuntu veo que no hay programa de ayuda para Linux. Sí que hay servicios de conexión a equipos en los que puedes hacerla pero me parece muy sofisticado y hay que enredar un poco instalando programas. Hete aquí que se me ocurrió solicitar el borrador por internet... y a los días (el domingo a las 16:00 horas, ¡Sres. que a esas horas en España se duerme la siesta rediez...!) me llega el SMS y me voy para el ordenador con el código de acceso. Enredo un rato y veo que no puedo acceder al borrador. Dejo pasar un tiempo, me digo "será que me he conectado muy pronto, y en domingo... seguro que no está disponible todavía".
Estos días he estado liado y no he vuelto a probar. Hoy me he puesto. Conecto y sigue sin funcionar... me mosqueo y empiezo a buscar los teléfonos de soporte para incidencias técnicas. Y voy pensando: "si es que soy un friki, seguro que digo estoy intentando trabajar con Linux y me dicen que bueno que no es tan fácil, que si usara otras cosas no tendría estos problemas", vamos complejos... ¡de friki! y buscando, buscando encuentro un servicio de CHAT para soporte, me digo "¿funcionará con Linux?". Intento unas cuantas veces y no hay manera. Pienso, "no será verdad que esto esté tan bien preparado". Sin embargo, en una de las veces que recargo la página, sale el mensaje: "Conectando con un operador" y veo la luz, y Jesús está allí:
-Hola, buenas tardes. ¿En qué puedo ayudarle?
Después de saludar amablemente me pregunta por mis intenciones ;-) , le suelto lo del LINUX y empieza a indicarme para hacer comprobaciones. Me hace cambiar una opción del FireFox, no va. Me hace descargar un programa para controlar de forma remota mi equipo... lo cual no termina de hacerme gracia, pero en fin ya que estamos ¡probemos todo! Lo descargo pregunto si lo instalo y me dice que en LINUX no suele funcionar que si no se ha instalado y lanzado solo que es mejor que lo borre y sigamos probando. Total que me hace mirar si tengo el JavaScript activado, sí que estaba...
Por el camino en una de las ocasiones se equivoca y me manda un texto todo con mayúsculas y enseguida se disclupa, además me trata todo el rato de vd. manteniendo las formas a todos los niveles.
Me dice que compruebe que no tenga activado el bloqueador de mensajes emergentes. Y ¡claro que lo tengo activado! ¡con lo incómodo que es no tenerlo! Me solicita que lo desbloquee y tode empieza a funcionar. Empiezo a darle vueltas y recuerdo que ya me contaron un caso parecido... Y me digo "yo tuve la precaución de que se permitieran los cuadros y mensajes emergentes" y luego caigo, claro los activé para la página pricipal de la Agencia pero veo que estos servicios están redireccionados a otro dominio... en fin.
Una vez solucionadas las cuestiones técnicas mantengo el chat, reviso el borrador hago algún cambio, lo grabo, consulto cuestiones de tributación a mi interlocutor y las resuelve perfectamente. Consulto alguna cuestión más del procedimiento y por fin termino. Doy las gracias, me responde amablemente y me recuerda que revise la conversación para dejar la configuración de mi navegador al estado original, lo cual me parece un detalle de profesionalidad.
Total casi una hora en línea, en algún momento he tenido la sensación de que mi interlocutor atendía varias conversaciones a la vez. ¿Qué estaría escribiendo en alguna de ellas cuando se le han escapado las mayúsculas? ;-)
En fin, bien por los buenos servicios, bien por el buen soporte y por lo fácil que he hecho este año la declaración. Y lo dice uno que cuando no ha tenido un ordenador cerca ¡las ha hecho a mano! y eso sí que es trabajar por trabajar.